"Nadie merece tus lágrimas... pero si alguien las merece, jamás te hará llorar..."
Anónimo.

sábado, 22 de marzo de 2008

Por favor... ¿Puedo irme ya?


Jeremías mira al techo, como siempre.
Tiene un reloj que refleja la hora al lado de la lámpara que cuelga sobre su cama. Son las 5:30 de la mañana,
ya no tiene sueño. Le gustaría levantarse y dar un paseo por la habitación o asomarse a la ventana a mirar como sale el sol.

A eso de las 7:30 vendrá Josefa, a darle el desayuno... a bañarle, a cambiarle las sábanas... ¿Qué estáis pensando? que Jeremías es millonario... que tiene una criada que se lo hace todo... Pues no.
Jeremías es tetrapléjico y no hay nada en el mundo que deseara más, que hacerse él mismo la cama, baña
rse o, simplemente, tomar la taza de café entre sus manos... y beberla despacio, solo.
La situación de Jeremías se hace cada vez más difícil. Implica a toda la familia y a Josefa, su adorable y jóven esposa.
Lleva postrado allí desde el accidente del 94... son 14 años ya. Josefa parece haber envejecido 20 ó 30.

Nunca se queja, cada mañana aparece con una sonrisa en el umbral de la puerta, con un café caliente y una tostada.
No sabe que Jeremías no puede notar ya el sabor de nada, desde hace más de cuatro años. Pero hace que lo saborea cada día, no quiere desilusionarla, ella cree que puede agradarle con algo...
No tuvieron hijos. "Después con el accidente... ya nunca los tendremos y he quitado la oportunidad a Josefa de tenerlos, pronto cumplirá 40... aún estaría a tiempo, si yo..."

Hace meses que le ronda la idea por la cabeza. Quiere irse ya. Pero no puede hacerlo solo. Qué triste, ni siquiera eso puede hacer solo. No basta con la humillación de pedir hasta que te limpien los mocos...

A veces piensa en las personas que dependen de una máquina para vivir. Son sus familiares quienes deciden si desconectarles o no. Sin embargo, él podría vivir hasta los 80 así, postrado en una cama. Solo puede mover la cabeza.

Como él dice: "Soy un cerebro apoyado en una almohada".

Al principio, sus propios pensamientos le acompañaban. Los cultivó de manera que le ayudaran a sobrellevar esta situación, pero sus propios pensamientos se han puesto en su contra y ahora hacen de carceleros de sí mismo.
Se han convertido en su enemigo más fiel haciéndole desear todo el tiempo cosas tan simples y tan imposibles que le vuelven loco.
Se vuelve loco cuando viene el médico a verle. Es un hombre apuesto y mira a Josefa... y Josefa le mira a él. Se torna desconfiado e intenta escuchar sus conversaciones, en la puerta de la calle, cuando se va ¡Y no lo oigo!
Josefa se siente incómoda y Jeremías se da cuenta...

También Soco, el perro, ya le molesta. Se subía a su cama y le lamía las manos pero su terrible humor acabó echándole de su lado. Le gritaba, le odiaba por poder salir y entrar a su antojo del cuarto...
"¡¡Quiero salir!! ¡¡Dios mío!! Quiero ir al baño solo y hablar por teléfono sin pedir antes que me marquen el número, quiero que el sol caliente mi cara, mientras el mar me mece entre sus olas. Quiero dormir con las manos bajo la almohada y quiero apartar las lágrimas de Josefa con mis dedos..."

Jeremías no puede más. Se quiere ir. Quiere ser libre, como a los 25, cuando viajaban tranquilos por aquella carretera de montaña. ¿de dónde salió aquella moto? El golpe fue terrible.
Y después... todo se acabó. Su vida terminó en aquella carretera... Pero, aquí seguía, postrado, 14 años después, y cuántos más, ¿otros 14? ¿otros 28? "Nunca podré curarme... nunca me levantaré de aqui..."

Jeremías es uno de tantos seres humanos que han llegado al punto, en q
ue el instinto de supervivencia pasa a un segundo plano. Donde las prioridades son otras. Piden ayuda, piden que la eutanasia, más allá de etiquetas morales, les deje ser libres.

El estado tal vez debería hacer algo... Si bien es verdad que, ¿cómo pedir al estado que institucio
nalice el suicidio? Convertirse en el brazo ejecutor de un ser humano con la ley en la mano... no parece tarea fácil.
Pero también es verdad que estas personas, con este terrible presente, tienen derecho a decidir si vivir o morir.

Si yo ahora bajara a la calle, me dirigiese a la boca de metro más cercana y saltase justo cuando el convoy llega a la estación... Nadie podría decir nada excepto: "pobre
cilla, qué le ocurriría para quitarse la vida". Una reseña, si acaso en la prensa, y a otra cosa mariposa.

Sin embargo, cuando hablamos de una persona, consciente, mentalmente válida, y desesperada, que pide ayuda a cualquiera que quiera echarle una mano para marcharse... resulta que este buen samaritano, se convierte en, poco menos que un asesino.

Es un tema muy complicado y controvertido... Pero no puedo evitar ponerme en la piel de Jeremías, sintiendo que es un cerebro sobre una almohada... y, francament
e... yo también querría irme, querría que alguien me ayudase con esa solidaridad que tanto nos llena la boca a los que estamos sanos...

¿Porqué ellos, no son dignos de esa solidaridad? Dignos de ese respeto por sus decisiones, en países que se jactan de grandes libertades y derechos para todos.


Jeremías no quiere votar, ni una subvención, ni siquiera necesita una rampa para salir de su casa... Jeremías sólo quiere irse, irse y ser libre... de una vez.

¿No ayudarías tú a alguien en una situación así? ¿Crees que se debería legalizar, al menos, que alguien les ayude a morir? o por el contrario, ¿te parece una aberración sólo pensar en ayudar a un ser querido a "irse"? ¿Tu conciencia no podría superarlo?
Es muy dificil contestar a cualquiera de estas preguntas, pero reclamo de vosotros una reflexión, un momento de atención para aquellos de quien nadie se
acuerda... Para esos cuerpos que no obedecen a sus maravillosos dueños y les hacen esclavos hasta de su propia vida...
Me interesa vuestra opinión, como siempre.

Un saludo.
Natacha.

53 comentarios:

Jorge dijo...

Si a alguien lo matan en la sila electrica,un Estado lo considera "ejecución" pero no asesinato.Si alguien muere en medio de una guerra pero en la misma acción logra eliminar a varios enemigos,es un héroe.Si cortan en pedazos a un feto en el vientre,se considera un aborto legal en varios países y no un asesinato.
Parece que asi como hay "condenas de muerte",también hay "condenas de vida".Si a los Estados les importa realmente la vida y la dignidad...¿que hacen por quienes sobreviven en las villas miseria o chabolas,o favelas,o como se las llame en varias partes del mundo?¿Que hacen por quienes mueren simplemente por no poder acceder a un buen sistema de salud?No solo hace falta debatir y decidir qué es más digno,sino también eliminar las contradicciones.

Natacha dijo...

Jorge está claro que las injusticias inundan nuestro mundo. Lleno de contrastes dolorosos. Con lo que nosoros tiramos a la basura sobrevivirían muchos.... pero no es ésa la cuestión.
Los gobiernos no hacen nada NADA, interesa lo de siempre: ignorancia, pobreza y sobre todo, incultura. Seres faciles de manejar, de congregar como rebaño y conducirlo por donde deseen...
Problema trás problema.
Un beso, desde este lado.
Natacha.

Zinar Ala dijo...

Las personas con enfermedades o incapacidades graves e irreversibles tienen derecho a morir si así lo desean, pero hay que tener en cuenta el estado psíquico de cada paciente y estudiar su caso. En otras palabras, estoy a favor de la eutanasia si el equipo sanitario coincide con la voluntad del paciente de poner fin a su propia vida.

Natacha dijo...

Zinar ala y crees que alguien sano pensará que una persona en su sano jucio querría morir?...
Un beso, amigo
Natacha.

Jerusalem dijo...

Estoy totalmente de acuerdo con la eutanasia, de hecho jamás querria quedarme como un vegetal en la cama o con dolores atroces.

Adolfo Calatayu dijo...

Querida amiga: es un tema tan delicado y difícil...te cuento que en principio digo que tengo cierta experiencia en discapacidades;por haber trabajado en institutos para chicos con limitaciones diferentes,y por existir uno en la familia...en fin podemos ver la idea bajo distintas luces,por ejemplo (y esto no son palabras),que TODOS poseemos algún grado de discapacidad o limitación,que concluimos que hay de distintos niveles;por ejemplo hay gente que es absolutamente incapaz de experimentar amor,incluso con seres de su misma sangre,no quiero extenderme demasiado ni abusar de tu espacio; pero bueno,hay que revisar cada caso en particular como alega el amigo Zinar Ala.
También es necesario decir que lamentablemente ocurre esto en países "del primer mundo",pero en los que existe una fuerte (y digamoslo,"nefasta")presencia del catolicismo -espero no ofenderte,Natacha querida- el cual incide en determinadas políticas de estado a contrapelo de la razón y el sentido común (el menos "común" de los sentidos),de modo que con la cuestión de "solo Dios tiene el poder de dar y quitar bla bla bla", se olvidan (cuando les conviene),de la famosa idea del "libre albedrío".
En fin,no te aburro más,estoy a favor de la eutanasia en algunos casos,pero para mí,la última palabra,SIEMPRE la tiene el involucrado.
Viste "mar adentro"? qué buena película !!!
Muchos besitos

Zinar Ala dijo...

Quería decir: no hay que facilitar la muerte a cada persona desesperada de su situación, hay que asegurarse de que no se trata de abatimiento temporal o por la falta de cariño,…etc.
Muchas personas han vencido sus desgracias y sus luchas merecieron la pena.

Vivencias en el Mariate dijo...

Terrible dilema. Si yo estuviese en su pellejo también me gustaría encontrar quién me ayudase a acabar con la tortura. Porque en estas condiciones, no se vive, se sufre tortura. Tortura por no poder andar, no poder beber, no poder besar a la persona amada y creo que lo peor, tortura por ver como tus seres amados pierden su vida por tí. Lo dicho, terrible.
Un saludo.

Unknown dijo...

la dignidad está en la vida. que yo sepa en la muerte ya no existe nada. no dios. no paraíso. no nada.

Es un tema muy controvertido y cada cual tendrá sus fundamentos/justificaciones/ideas....
Coincido con jorge López. hay que eliminar contradicciones.

aveces nos aglomeramos en tantas palabras. en tantos significados que muchas cosas entre -tanto circo humano- pierden su verdadero origen. su significado.
yo amo la vida. creo en la vida. no creo en dios. no amo a dios. de todos modos creo -sigo creyendo- que no podría acabar (aunque a gritos lo pidiesen) con la vida de ningún ser.

Buen espacio Natacha.
Un beso
Ari

kiko dijo...

Un tema muy complicado o no,yo creo que somos nosotros quienes lo hacemos complicado,si una persona quiere morir no se le debe de denegar y si como en el caso de jeremias el no puede hacerlo por el mismo y pide que lo haga otra persona,pienso que nadie deberia de impedirlo,pq es por deseo propio del enfermo,ahora bien,si yo me encontarse en esa situacion de tener que ayudar a una persona a morir tengo que decir que jamas podria,no tendria suficiente valor para hacerlo

besos

Genín dijo...

Uf! Menudo tema has tocado...
Yo no me atrevo a decir ni pio, no tengo derecho, pero si tengo opinión, lo malo es que cambia a cada momento.
Cuando cree uno tenerlo todo muy claro, te entra otra duda que lo desmonta todo.
Y eso sin meter la Religión de por medio.
Muy difícil, amiga, muy difícil, ojalá que nunca me toque tomar partido obligatoriamente.
Salud, Genín

Natacha dijo...

Querido adolfo. No me ofendes en absoluto, no soy creyente, me gustaría (bien lo sabe dios...jjejej) y es cierto que se utiliza la religión para justificar otro tipo de carencias o para echarle "el muerto" (nunca mejor dicho) a otro.
Por supuesto que la última palabra debería tenerla el involucrado, faltaría más...
Esos seres de los que hablas... incapaces de sentir amor... tengo alguno cercano, Psicópatas... en frin eso da para otro post...
Vi la peli... muy bonita y claro, muy triste.
Un beso (nunca puedes ofenderme,)
Cariños...
Natacha.

Natacha dijo...

Jerusalem, tampoco querría estar en esa situación, pero no sé si desearía morir... demasiado cobarde sería, yo creo...
Un beso, guapa.
Natacha.

Natacha dijo...

Zinar ala, claro yo sólo hablo de personas en una situación límite como Jeremías, en este caso.
Ayer mismo ví a una mujer en Francia con el rostro desfigurado... es verdad que es terrible... pero no entiendo porqué pedía la muerte. Ella tenía los recursos suficientes como para ejecutarse a sí misma, si eso deseaba...
No entendí muy bien sus demandas. Al final... pobre, murió ayer.
Un saludo, amigo.
Natacha.

Natacha dijo...

Hache, supongo que cuando te ves en la situación, la postura es bien clara. O lo harías o no. Especular así, desde una silla cómoda frente a un teclado... no es fácil.
Un beso, cielo.
Natacha.

Natacha dijo...

Hola Ari... no sé si yo podría hacerlo tampoco... pero sí te digo que ver sufrir día y noche a un ser al que amas... Debe ser durísimo negarle la libertad.
Un beso, gracias por venir.
Natacha.

Natacha dijo...

Lordbrolin, creo que no es una cuestión de valor, fíjate. Yo creo que la propia situación te hace verlo claro. Imagina al ser que más ames... suplicando paz... No sé si podría decirle:No. Quizá buscaría a alguien que lo hiciera ¿no? y eso que connotaciones traería después?
Buff, muy complicado y doloroso.
Un beso, amigo
Natacha.

Natacha dijo...

Genin, a ti te pasa como a mí cuando veo esas películas de juicios.... cuando habla el fiscal, odio a muerte al acusado, cuando lo hace el abogado... me da una pena...
En estos temas, creo que llegado el momento (esperemos que no nos toque nunca) se tiene clara la postura.
Un beso, cielo.
Natacha.

Y sin embargo dijo...

Creo que el hecho de mantener con vida a una persona que pide a gritos morir no es más que egoísmo y cobardía. Egoísmo, porque a todos nos cuesta aceptar la muerte de alguien a quien amamos, preferimos verlo postrado en una cama aunque nos duela y tenerlo cerca antes que enterrarlo. Cobardía, porque ¿cómo será nuestra vida después de haber ayudado a morir a un ser querido? Hay que ser muy valiente y estar muy seguro de uno mismo para tomar una decisión así.
¿Realmente es vivir hacerlo conectado a una máquina? ¿Realmente es vivir pasarte meses en una cama sin ser consciente de lo que ocurre a tu alrededor? No, ni vive el enfermo ni viven los que están a su alrededor. Pasé por ello, lo sé muy bien.

Un bico grande, guapa.

Situco dijo...

bueno, yo estoy a favor de la eutanasia... incluso activa.

al menos si yo un día estuviese como un vegetal y solamente diese "trabajo"... y ... para estar mirando el techo y haciendo padecer a los que quiero...

enfin, es una opinion, espero que ni yo ni nadie de los mios, amigos incluidos, se encuentre así

bxcx

Natacha dijo...

Y sin embargo, No, no es vida vivir así. Creo como tú, que hay que ser muy valiente y generoso para ayudar a morir al alguien que quieres...
Un beso,
Natacha.

Natacha dijo...

xto, que ninguno nos encontremos nunca en esta situación, desde luego, yo creo que también me posicionaría a favor de la eutanasia... vivir así, en realidad no es vivir.
Un beso, amigo
Natacha.

Vivencias en el Mariate dijo...

Natacha, creo que no me has entendido, sorry, creo que no me he explicado bien.
Te planteaba una cuestión importante, ¿qué es más importante? ¿Ayudar a alguien a morir por amor a él? ¿o desear la muerte por amor a la otra persona?
Un saludo.
PD. Frente a un teclado especulan muchos, otros lo vivimos a diario.

Natacha dijo...

Hachexx está claro que no nos entendimos. No me refería a que tú especularas, sino en general. Por supuesto hablar es muy fácil... pero nunca sabemos qué situación vive quien escribe. ¿verdad? a veces pecamos de valientes o de osados y herimos sensibilidades sin querer. Si ha ocurrido eso contigo te pido perdón.
Un beso, guapa.
Natacha.

Elsis dijo...

Natacha, creo que aunque se me parta el corazón, ayudaría a encontrar la paz de quien amo si la situación fuera irreversible.
Es terriblemente doloroso y difícil.Pero encontraría la fuerza y el valor para que las autoridades me escuchen.

Besos.

Jorge dijo...

Hola amiga. Penélope ya escribió su parte del relato.Mas breve de lo que esperaba,pero sé que no es fácil.Yo ya escribí también mi continuación despues de ella.¿Lista para continuar con tu parte? Me gustaria saber como sigue.Un abrazo desde Mar del Plata.

Lillu dijo...

Yo creo en la libertad de cada persona para decidir por sí misma su futuro. Si los estudios médicos confirman que no hay cura para su enfermedad, los psicólogos deberán confirmar que el estado mental del paciente es el idóneo para tomar esa decisión. Ya te piden mil papeles y mil estudios para operarte de estética o hacerte un cambio de sexo, con más razón para decidir un cambio tan drástico como tu propia muerte. Puede haber casos de depresiones pasajeras, pero hay personas que durante años pidieron una muerte digna (el caso del gallego Ramón Sampedro fue uno de los más conocidos) y si en todo ese tiempo no cambiaron de idea y siguieron luchando, significa que tenían bastante claro lo que querían hacer con su vida.

Si en países tan civilizados como Suiza la eutanasia es legal y se aplica, está claro que es posible tomarlo como ejemplo para otros países que todavía no tienen legislación al respecto.

Saluditos

Anónimo dijo...

Terriblemente duro. Pienso que cada persona mentalmente sana, en un caso así debería poder decidir sobre su propio destino, si es que así lo considera; como bien dice Jorge porqué la condena a muerte si, las guerras si, el aborto si y la eutanasia consentida no? si esta última es por voluntad propia? Contradicciones de este sistema cada vez menos entendible...besos...

Vivencias en el Mariate dijo...

No pasa nada. Un abrazo.
PD. Me quedo con el beso que es mío porque me lo has dado, lo de guapa se lo transmito a la Hache original. Yo soy xx.

Natacha dijo...

Elsis, hablas como una persona valiente y consecuente... me gustaría también tener esa fuerza si llegara el momento.
Un beso, preciosa.
Natacha.

Natacha dijo...

Jorge ahora voy a leerlo. Espero que no me lo hayáis dejado muy complicado.
Un besito desde acá.
Natacha.

Natacha dijo...

Lillu, totalmente de acuerdo. Y,claro hablamos de personas que no están con una depresión pasajera. Planteaba la cuestión partiendo de la base de que quien lo solicita está estable mentalmente (bueno, todo lo estable que se puede estar en esa situación)
Tal vez sí deberíamos tomar ejemplo de otros países, aunque no para todo...
Un beso, guapa
Natacha.

Natacha dijo...

Penélope, madre mía, contradicciones hay mil en el mundo, algunas terribles, la verdad.
Estoy contigo
Un beso,
Natacha.

Natacha dijo...

Hachexx... como os empeñáis en poner esos nombres tan... neutros.. no había caído en lo de xx.
Lo siento, guapo. (intentaré no olvidarlo más)
Natacha.

Pedro Estudillo dijo...

Natacha, a mí no me resulta nada difícil contestar a tus preguntas. Ayudaría a Jeremías o a cualquier persona amada a cumplir sus deseos y te aseguro que esa noche dormiría muy feliz y tranquilo.
La muerte es una de las tareas aún pendientes del ser humano: su aceptación, aprender a vivir con ella, aprender a utilizarla en nuestro propio beneficio cuando se tercie, perderle el miedo. Algo tan natural como la vida misma no puede ni debe seguir siendo el tabú en que la hemos convertido. Lo importante no es cúando moriremos, sino cómo.
Me alegro que exista gente valiente como tú que aborden estos temas tan controvertidos. Ese es el camino para que dejen de serlo.
Un fuerte abrazo.

Natacha dijo...

Pedro, gracias por venir. Bueno, tu eres un ser valiente y con las cosas bastante claras...
Es maravilloso escuchar como desmitificas algo que, efectivamente, hemos convertido en tabú.
En mi blog de la oscuridad tengo la frase: "la vida es solo es camino hacia la muerte"... y en realidad dices algo genial "no importa cuándo, sino cómo.
Siempre acertado, Pedro.
Un beso, honras esta trastienda con tu presencia.
Natacha.

Bowman dijo...

Por supuesto, SI a la eutanasia. Siempre.

No estoy de acuerdo con que un equipo médico tenga que estar de acuerdo. No hay ningún equipo médico detrás cuando alguien (con problemas psíquicos) decide tirarse por el Viaducto de Madrid o por un puente, por ejemplo, lo que supone otro agravio comparativo contra la persona que está impedida en una cama en plenitud de sus facultades psíquicas. Además, un médico que me niegue la eutanasia podría estar influenciado por sus creencias religiosas (sólo Dios dá y quita la vida) que yo no comparto y no tiene por qué imponérmelas. (Y si los médicos que tendrían que aprobarlo son los de la Consejería de Sanidad de Madrid nombrados por Esperanza Aguirre, menos razón para que decidan por mí)

Yo tengo derecho a decidir como vivir y también me gustaría decidir cómo morir, si puedo. Nunca otras personas... y menos el dios de otras personas.

En otras culturas antiguas, por ejemplo algunas tribus americanas, la gente se retiraba por decisión propia a dejarse morir en el bosque cuando sentía que había llegado el momento adecuado. Por respeto a los demás, pero también por respeto a sí mismos. No pretendo que se haga esto, por supuesto, pero querría que se respetara mi integridad personal y mi derecho a decidir (e incluso a equivocarme).

Natacha dijo...

Bowman, efectivamente, a estos enfermos se le añade el handicap (como si no tuvieran bastante) de necesitar la "aprobación" de un dudoso personaje, que tiene una carrera universitaria (vaya cosa) y que ha de decidir si eres o no válido para decidir qué hacer contigo mismo. Anda que como nos toque aquel que no quiso sedarnos... ¿Cuantos habrán muerto sufriendo después de lo del hospital de Leganés? en fin...
Un beso, amigo mío.

Bowman dijo...

Precisamente esta semana santa ha habido unas declaraciones de no-sé-qué obispo en contra de las sedaciones, diciendo que Cristo no tuvo cuidados paliativos...

Si tanto hay que parecerse al tal Cristo no sé por qué no se hacen crucificar.

Y también habría que recordarle a tal obispo la historia de Longinus (si eso no es eutanasia, que baje Dios y lo vea). Segun se cuenta en las escrituras, atravesó el corazón de Cristo en la cruz, para interrumpir su sufrimiento, iluminado por la gracia de Dios, pero claro, ahora resulta que no aparece en la biblia sino en escritos "apócrifos" (qué suerte poder decidir lo que es apócrifo y lo que no, con lo fácil que les resulta "demostrar" los dogmas con el típico "escrito está")
Y si es apócrifo, no entiendo que Longinos esté representado en tantos "pasos" de semana santa, que tienen el nil obstat eclesial...

Besos dulces como torrijas.

Natacha dijo...

Bowman, la iglesia hace y deshace a su antojo y conveniencia... no sé de qué te asombras. No quiero entrar muy profundamente en el tema por no herir las sensibilidades de personas creyentes que seguro que nos leen, pero la iglesia es ejemplo, muchas veces de crueldad, ceguera, egoísmo, etc...
No nos corresponde juzgarles, pero, al menos, que no toquen las narices con la vida de los que no creen...
Tampoco entiendo lo de Longinos, tal vez alguien entendido en el tema, o creyente tenga una explicación para nosotros, viles herejes...
Un beso con sabor a.... tarta de manzana (como ya se ha acabado la S.S. uf qué mal suena)
Natacha.

la cocina de frabisa dijo...

Por supuestísimo que estoy a favor de la eutanasia. He pensado mucho en ello, como creo que lo hemos hecho todos. No me gustaría verme en una situación parecida a la del protagonista de tu relato. En casos así, mejor que te ayuden, que te eviten más sufrimientos. Me encantaría que se legislara pronto, si se han roto barreras en otros ámbitos, ¿porqué no en éste?

Un beso

JotaJota dijo...

Natacha, no necesito reflexionar un segundo sobre esto. Soy de tu opinión y poco más hay que contar.

Me gusta la expresión que utiliza Jorge "hay condenas de vida". Muy descriptivo.

Es muy complicado decidir si alguien que no tiene modo de comunicarse debe seguir viviendo o no. Alguien que depende de una máquina y que en teoría "está muerto". Sin embargo no sé por qué es tan difícil que alguien con pleno uso de sus facultades mentales pueda ver cumplida su esperanza de liberación.

Millones de besos. Felicidades por el post.

PD: me estremece escuchar este poema Mar adentro

Jordicine dijo...

Has tocado un tema difícil, la verdad. Yo creo que hay que hablar desde la lejanía es difícil. Ayudar a morir? Te expones a mucho, está claro. Pero a veces hay que tener humanidad con el que sufre. No sé. Estoy hecho un lío. Un beso.

Ana Garcia dijo...

Hola guapa, aunque ya te he avisado en Un país en la luna, por si acaso, aquí tienes un regalito:
http://chicasblogosfera.blogspot.com/2008/03/natacha.html

Has pasado el casting. Un besito

Natacha dijo...

Fabrisa, si, que se rompan ya esas barreras... hay personas que lo claman a voces...
Un beso, guapa.
Natacha.

Natacha dijo...

Jotajota, qué hermosura de poema... la verdad es que se ponen los pelos de punta... cómo después de escuchar a alguien decir estas cosas, puedes negarle la paz... no lo entiendo.
Un beso amigo mío
Natacha.

Natacha dijo...

Jordicine, desde luego no es una situación en la que ninguno quisiéramos vernos... pero hay personas que lloran, mucho.
Es necesario pensar también en estos "lios" en los que la vida nos pone a veces.
Un beso.
Natacha.

Natacha dijo...

Fair lady... me da un poco de miedo ir a mirar... Bueno, estoy segura de que has sido benevolente conmigo.
Un beso y gracias de todas formas, pase lo que pase. jejeje.
Un besito (tu pasaste mi casting de amistad hace mucho rato ya)
Natacha.

ka dijo...

Dura la vida,
para mucha gente.
Para él y para ella.
Dura y duradera.
En una ocasión, siendo yo muy joven se me presentó el dilema, una compañera dijo que no (era monja) y yo dije que sí, nunca me sentí mal.
Un beso.

Natacha dijo...

Ika, sin duda fuiste muy valiente. No es una decisión facil. Y menos siendo joven.
Un beso, amiga
Natacha.

Juancho dijo...

Pues sí, este tema es bastante peliagudo. Yo soy de la opinión que se debería dejar morir con dignidad a aquellas personas que en ese tipo de situaciónes... no desean vivir.

Pero bueno, es una opinión personal y nada más.

Por cierto, muy bueno tu blog. Enhorabuena. :)

Un saludo

Chuspi dijo...

Por supuestisimo que siempre a favor de la eutanasia en casos como éste en que al menos la persona está consciente y ni siquiera puede introducirse una inyección por sí mismo para ejecutarse.
Fuera la Iglesia de las narices !!
Fuera equipos médicos y fuera todo aquel que sigue opinando desde el umbral de la supuesta sabiduría que su oficio, profesión o cargo, en cierto modo le obliga a desempeñar tal postura.

Porque todo es una burda falacia en sí misma.
La persona que desea morir,como ya han comentado, lo hace y punto.Y se suicida y san se acabó.
Pero en estos casos, al menos yo personalmente,no podría vivir viendo como este familiar a mi cargo se consume día a día ante mis ojos sin más.
Hace unos días, un amigo mío de 40 años, con su mujer con un tratamiento de cancer de mama bastante agresivo y 3 niños pequeños todavía, me decía lo siguiente: El otro día G.me dijo, Manuel,si algún día esto mío se complica, me ayudarías a morir ??
Y mis ojos se empañaron cuando mi amigo sin reparos me contestó: Sí, sin duda alguna, asi vaya a la carcel, pues no permitiria de ningun modo que te consumas como un animal rota de dolor sin poder hacer nada.

y sé que me lo dijo totalmente en serio.

Natacha dijo...

Chuspi, estoy segura de que hay muchas personas dispuestas a ayudar a quien pide morir a gritos.
Afortunadamente los casos no son muchísimos... habría problemas legales en ese caso.
Un beso
Natacha.